miércoles, 24 de junio de 2015

Mamá, empezamos a comer?

Por: Virginia.


Queridas mamás, aquí va el tema más complicado de todos…¿Cuándo se empieza con las papillas?

La Organización Mundial de Sanidad, como la UNICEF, aconsejan no empezar con la alimentación complementaria antes del 6 mes, mientras la ESPGHAN, (European Society for Paediatric Gastroenterology, Hepatology and Nutrition) y la EFSA (European Food Safety Authority) consideran benéfico un empiezo temprano: entre el 4 y 5 mes, en particular si el niño es alimentado con fórmula. De hecho en Europa el destete empieza alrededor del cuarto mes, y se insertan lentamente unas cuantas cucharadas de papilla cada día, para que el niño se acostumbre a una textura diferente, una cuchara en la boca, y en general al ritual del comer. 

Mis padres empezaron con las papillas a mis 5 meses y a los 4 meses y medio de mi
hermano. Puedo garantizar que estamos saludables!

Intentando también quitar el drama al asunto: a mi el termino “destete” no me gusta para nada: es una palabra que evoca madres crueles que quieren quitar la teta al hijo hambriento porqué quieren de vuelta su vida….o algo así.  En realidad, nada a que ver. La “Nutrición Complementaria”, como se llama siendo un poco más técnico, quiere decir simplemente añadir a la dieta del niño una serie de proteínas, grasas, carbohidratos, oligoelementos de diferente proveniencia que se suministran juntos a la leche. La leche materna o en formula continua siendo alimento fundamental de la nutrición del niño hasta, por lo menos, el año.

Benjamin Spock escribe “En los primeros años del ‘900 se empezaba la alimentación complementaria cuando el niño cumplía un año. Ahora se recomienda empezar con la primera papilla entre los 4 y los 6 meses. Existen dos ventajas seguras si se empieza antes del cumplimiento del sexto mes: los niños se acostumbran más fácilmente a la idea de comer y una variedad de alimentos sólidos aporta a la dieta más nutrición y mayor dosis de hierro”.

Si bien pediatras y expertos difieren acerca de cuando empezar a dar de comer al niño, todos están de acuerdo que la mamá tiene que aprender a reconocer las señales. Yo empecé a darle de comer a Filippo unas cuantas cucharadas de manzana y yogurt a los 4 meses y medio; escupió casi todo, hizo mil caras extrañas, y después empezó a abrir la boca todas las veces que veía la cuchara acercarse....y se veía feliz. 
Yo decidí que estaba listo para comer y de hecho, lo estaba.

Un pediatra me dijo que NO, nada de alimentos solidos hasta los 6 meses. Absolutamente prohibido. A mi me parecía una locura. Ayer conocí mi nuevo pediatra y él, especializado en gastrología pediatrica, aconseja empezar con la alimentación complementaria a los 5 meses. Le dije que le había empezado a dar algunas cucharadas a Filippo a los 4 meses y medio. 
"Le gustó?"
"Si"
"Tuvo algún problema de estomago después?"
"No"
"Entonces está bien".

Por esto.....instinto de mamá. 

¿Cuáles señales?

El niño parece todavía hambriento después de su dosis de leche.

Cuando logra mantener bien erguida su cabecita.

Cuando desaparece el reflejo de extrusión (el niño empuja con la lengua la comida afuera de su boca)

Cuando parece interesado a la comida de los adultos.









lunes, 22 de junio de 2015

De la barriga al corazón

Por: Margaret Rodríguez.

El nutrir con amor empieza antes de que nuestro hijo esté listo para el destete....empieza con la idea de tener un hijo, la ilusión, el deseo.

¿Como comenzar a prepararnos, que podemos cambiar para que el cuerpo se encuentre listo para hornear por 9 meses el ser más preciado de la vida? Las recomendaciones que voy a dar aquí no sirven solo para el etapa del embarazo....pueden continuar en el tiempo, para el beneficio del mas chiquito hasta el más grande de la familia…no, Filippo?


El embarazo es un período de cambios increíbles e indescriptibles…por muchas cosas no hay explicación y a la vez todos opinan al respecto; tenemos que aprender a escuchar nuestra intuición de mujer, madre y nuestra sabiduría ancestral siempre nos acompaña, y actuar desde el corazón
Nuestro amor por nuestros hijos se refleja en como nos cuidamos mamás, y papás también!
Lo reconfirmamos cada día en creando buenos hábitos saludables, si comemos nutricionalmente balanceados en la concepción, durante el embarazo, en la lactancia...hasta como se cuida una mamá adoptiva que necesita estar lista para recibir a ese regalo divino que es la maternidad. 

En esta primera entrega generalizaré los temas que iremos desarrollando en Cucharita Corazón, la idea no es abrumarte de información sino concientizarte sobre los beneficios de una alimentación saludable....aquí van unos tips!

  • Cocina tus alimentos y enrequecelos con energía positiva.
  •  Come a la misma hora siempre así los niveles de azúcar se mantendrán estables
  • Ajusta tu alimentación gradualmente, muchos cambios pueden agobiarte y la idea es que disfrutes el proceso.
  • Al comprar, piensa en alimentos locales, orgánicos y estacionales…muy probablemente más económicos también.
  • Agua, agua y más agua…añádele  rodajas de limón o manzana verde o pepinos o frambuesas enteras. Se creativa  y combina a tu gusto.
  •  Come con los colores del arcoíris…variado en sabores, colores y texturas. Recuerda incluir Verduras o vegetales, hierbas y especias, cereales, quinua, kiwicha, leguminosas, nueces, semillas, lácteos y/o sustitutos, frutas, proteína animal o vegetariana y  bebidas calientes como infusiones, chai, descafeinadas preferiblemente o no más de 1 taza al día y antes de las 2 pm.
  • Descansa, relájate, duerme y aprecia cada instante como único y especial…cada detalle en nuestra vida son esenciales para crear nuestro maravilloso entorno!
  • Sabías que las semillas de sésamo contiene 4 veces más calcio que la leche de vaca? Así que aprovéchala en sopas, Smoothie, batidos, ensaladas, granola y leche de sésamo…Yummy!!!


Receta del día: Chai o Té Yogui.

El yogui té es bueno para la sangre, el colón, el sistema nervioso y los huesos. Bueno también para el resfriado, la gripe y la debilidad física, pues contiene la poderosa y calurosa raíz de la trinidad, el jengibre. Disfrútalo caliente o frio!

Ingredientes (para una taza):

10 onzas (315 ml) de agua
2 rebanadas de jengibre fresco
3 clavos
4 vainas de cardamomo, resquebrajadas
4 granos de pimienta negra
1/2 raja de canela
1/4 cucharadita de té negro o verde o Rooibos o una bolsita de té (opcional), puede ser solo especias
1/2 taza (125 ml) de leche de soya (o la que prefieras, con leche de arroz también es riquísimo. Opcional hacerlo con leche o almendras)
Miel para dar sabor (opcional) o Stevia

Listos para comenzar!

Hierve el agua y agrega las especies. Cubre y continúa hirviendo durante 20 o 25 minutos. Remueves del fuego y añade el té negro; y déjalo  por 1 o 2 minutos. Añade miel y leche a tu gusto, hierve de nuevo y quítalo del fuego. Cuela; sirve y disfruta!


Ya seguiremos hablando sobre alimentos y alguno que otro consejo sobre relajación y yoga. 
Nos vemos pronto…





domingo, 21 de junio de 2015

Filippo y sus papillas.

Por: Alessandra Hunlede.


Desde pequeña tuve la suerte de mudarme en varias casas con mi mamá. Digo suerte porqué en nuestras mudanzas encontré y conocí gente que ahora considero mi familia. Y en cada familia hay niños! Me encantan los niños y siempre estuve rodeada de ellos por cortos y largos periodos; y como ellos han dejado algo en mí, yo espero de haber dejado algo en ellos. Filippo es uno de mis niños. Lo conocí cuando tenía un mes y era un bebé pequeñito con ojos orientales, un niño tranquilo y sereno. Dormía, se despertaba, lloraba un poco, tomaba su leche y se volvía a dormir. Ahora es igualito, solo con más cachete!


A Filippo le gusta comer. Yo además de encargarme de niños por pasión, estudié cocina de profesión, así que estuve feliz cuando decidimos de empezar a darle comida, a los cuatro meses y medio.

Empezamos con yogurt y galletas; continuamos con purea de manzana y purea de zanahoria; y ahora que cumple cinco meses vamos a pasar a unas papillas un poco más complicadas….que explicaré en el próximo post!!




¿Cómo preparar las primeras papillas?

1) Papilla de yogurt y galletas integrales.

Escogimos el yogurt griego biológico y galletas integrales de yogurt; encuentran todo en la bioferia. Para desmenuzar las galletas hasta hacerlas puré me ayudé con un poquito de agua caliente. Las galletas hacen sí que el yogurt se endulce un poco y sea más agradable para el niño. De ahí le añadí dos cucharadas de yogurt….y nada más!! Para acordarse: 125 ml de yogurt griego sustituyen 250 ml de leche.

2) Papilla de manzana y papilla de zanahoria.

Manzana y zanahorias tienen el mismo tipo de preparación: se limpian muy bien, se quita la cáscara, se hacen en trocitos, se cuecen y después se convierten en papilla.

En ambos casos preferí cocer la zanahoria y la manzana al vapor; esto porqué siendo una cocción a baja temperatura (inferior a los 100 grados)  la comida conserva la mayor parte de las vitaminas y  de  los minerales. Se recomienda también no licuar las frutas y las verduras porqué pierden las fibras. Tengo a decir pero que muchos niños, y Filippo entre ellos, no aguantan texturas harinosas o con trocitos, y lo único que aceptan es una crema perfectamente licuada.

Y ya está!!





¿Qué ingredientes usé?

Yogurt Griego:
Escogemos el yogurt griego por varias razones: lo yogurt normal es filtrado solo dos veces, mientras el griego es tres veces, de forma que la parte líquida es casi completamente eliminada.  Es más proteico pero tiene meno sal, carbohidratos, lactosa y azúcar, entonces es más digerible y nutriente. Las calorías son las mismas que el yogurt normal pero tiene un poquito más de grasa buena.

Zanahoria:
La zanahoria ayuda y prepara las paredes del estomago a digerir los carbohidratos; el caroteno previene la diarrea y es una verdura que no produce gases. Se escoge como primera verdura para las papillas porqué es más fácil que el niño acepte y se acostumbre a un sabor dulce más similar a la leche, materna o en fórmula.

Manzana:

La manzana, junto con la pera y la ciruela, es la fruta aconsejada para empezar a comer. Es una fruta que muy raramente provoca alergias, es composta principalmente de agua (85,2 gr en 100 gr) y carbohidratos (10 gr en 100). Tiene un efecto de protección de las paredes del estomago y sus mucosas. La manzana es una fruta que se encuentra en cualquier mes del año, y es aconsejable buscarla de agricultura biológica, así podemos estar seguros que no se han usados muchos conservantes. 

sábado, 20 de junio de 2015

La historia de este blog.

Por Virginia Battisti.

Hace casi cinco meses nació Filippo Luigi. Un niño chiquitín, ya que nació de 7 meses y medio, y con una gran curiosidad hacia el mundo. Como mamá primeriza creo que leí todo lo que se podía leer acerca del bebé: los horarios, el sueño, las enfermedades, el desarrollo, y claramente, la comida. Solo pude darle pecho por un mes, en niño no crecía y empecé con la formula, una linda y biológica comprada en Italia. Claro que lo sentí, ahora con toda esta onda de la crianza con apego si no das teta por dos años está muy mal, pero en fin. Filippo creció, todos felices, él con su biberón, yo con él y su biberón.
Aprendí también que los pediatras hacen mucho terrorismo psicológico: que no crece, que los percentiles, que el peso, que la estatura, que no sé que. Yo aprendí a creer, junto con todos los libros que leí, que el instinto de la mamá es lo que hace crecer bien un niño. Si el niño come, es feliz, duerme, que pese 200 gramos menos de lo que tendría que pesar no me parece un drama. Ahí está; más que crianza con apego la mía es “Crianza Sin Dramas”. O sea, no me voy a estresar porqué soy mamá, lo importante es que mi hijo esté feliz.
En fin, yo soy italiana y vivo en Perú, pero prefiero los métodos de crianza un poco más europeos, que me parecen en general más flexibles y con menos paranoias. Algo que no entendía era porqué el pediatra me decía que hasta el sexto mes NADA DE COMIDA. Como, pensaba yo: en Italia el destete empieza al cuarto mes; y sinceramente los italianos son una población bien saludable, entre los más saludables del mundo. Yo empecé a comer a los 4 meses y medio, mi hermano a los cuatro meses. Una cucharada de manzana, media tacita de zanahoria, justo para aprender sabores nuevos y familiarizar con la cuchara.
Dos de mis libros favoritos "La grande enciclopedia del niño"  y  “El libro del sentido común del cuidado de bebés y niños” de Benjamin Spock (sí, sé que es un poco viejito) daban una serie de indicaciones para cuando empezar el destete que nada tenían a que ver con la edad biológica, sino con cuando el niño estaba listo: esto me pareció tener mucho más sentido común que la regla de los 6 meses. Filippo empezó a tener todo el día, constantemente, las manos en la boca, querer sentarse solito, y llorar después de cada biberón por hambre. Todas indicaciones que, según mis guru de la puericultura, querían decir que el niño estaba listo.
Ya, me lancé: compré yogurt biológico, galletas integrales con miel, herví una manzana, mezclé todo en un bol, y con mi cucharita de silicona intenté darle de comer, un domingo al mediodía. Comió todo, feliz, sin escupir, sin vomitar, y haciendo gorgoteos cada vez que me demoraba demasiado a darle otra cucharadita.
Así empezó; cuando mi hijo me dio señales y yo, en mi corazón de mamá, pensé que sí, estaba listo para comer. Sin demasiado estress ni traumas. Ahora tiene 5 meses, son dos semanas que come y estamos todos felices.
Resulta también que el papá de Filippo, Israel, es chef. Y su niñera, Alessandra, es cocinera; y su tía Margaret nutricionista. Así que nosotras chicas pensamos: porqué no abrir un blog? Con consejos, recetas para papillas, opiniones y artículos acerca de la alimentación del bebé? Y aquí estamos, con cucharitacorazón, para crear un espacio donde poder encontrar recetas fáciles y ricas para que sus repollos empiecen a comer con amor.